El proyecto eco social Gardeniers presenta su nuevo producto procedente de los huertos ecológicos “Cielos de Ascara”, la piparra o guindilla embotada en el vivero de empresas agroalimentarias ADECUARA, en Jaca, bajo la denominación “Legado de Ascara”. Este producto forma parte de la oferta conjunta que el Centro Especial de Empleo Gardeniers y su proyecto inclusivo “Cielos de Ascara”, en La Jacetania, desarrolla mediante la recuperación de cultivos autóctonos y ecológicos y la producción de productos frescos y conservas de alta calidad, con el denominador común de proceder de un proyecto de alto impacto social, en el que trabajan personas con discapacidad intelectual o en riesgo de exclusión.

Para dar a conocer el nuevo producto ecológico, Gardeniers propone una Gilda o banderilla “Legado de Ascara”, gracias a los productos enviados desde Gardeniers, con la colaboración de “Martín Martín”, el vermut ecológico de Bodegas Valdepablo y el Centro Especial de Empleo Ilersis. Acompañando a estos productos, una infografía ilustrada por el artista y diseñador aragonés David Adiego como guía.

El presidente de ATADES, Jesús Soto, destaca que “podamos ofrecer magníficos y muy cualitativos productos ecológicos, pero, por encima de todo, nuestra misión y nuestro proyecto, en ATADES y en Gardeniers, es transformar la sociedad y ofrecer oportunidades de formación, trabajo y futuro a muchas, cuantas más mejor, personas con discapacidad intelectual”.

Por su parte, Félix Arrizabalaga, gerente de ATADES, destaca los proyectos actualmente en marcha en el contexto de Cielos de Ascara, recordando que se ha convertido en un proyecto con “un impacto inclusivo en el territorio”. Un impacto de “transformación” para las personas con discapacidad intelectual y, por las que, ATADES trabaja en su día a día.

El proyecto Cielos de Ascara cuenta con el apoyo de la Secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y para Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach, quién coincidiendo con la presentación del nuevo producto y como conocedora, en primera persona, del proyecto, se muestra “enamorada de Cielos de Ascara, de su organización” y “de vuestra gente”, asegura. Además, destaca que ATADES es una “lección de humanidad, desarrollo sostenible y visión de cómo se deben hacer las cosas”.

La Piparra “Legado de Ascara”

La piparra se cultiva en las huertas de Ascara, se riega con las aguas del río Estarrún. Es un cultivo que se planta a finales de mayo y se empieza a recolectar a primeros de septiembre. Su cosecha dura hasta finales de octubre.  Es el segundo año que se realiza este cultivo, sobre una superficie de 1.500 metros cuadrados. Cuando llega la época de recolección, la piparrra se recoge dos veces por semana y solo las que están con un tamaño y color óptimo para su embotado. Una vez recogidas se llevan a la nave donde se guardan hasta que se hace el proceso de embotado que se realiza una vez a la semana.

El proceso de embotado se realiza en el vivero de empresas que tiene la Comarca de La Jacetania en Jaca, concretamente en ADECUARA. Los trabajadores de Cielos de Ascara hacen el proceso de poner las piparras con el vinagre de forma manual, después se les dan un pequeño tratamiento térmico. El proceso es dirigido por el tecnólogo de Gardeniers, Diego Torrecilla, el cual evalúa el proceso. Así durante las 6 semanas que dura la recolección del cultivo.

Al igual que los campos de Ascara, las instalaciones de Jaca están bajo la normativa europea de producción ecológica. Las piparras están etiquetadas con el logo de este tipo de producción. Este año ha sido el segundo año de producción en campo, pero el primero de embotado. Se han hecho 800 botes de piparra que se podrán comprar tanto en tiendas especializadas, como en los mercados agroecológicos de Zaragoza, el Mercado Central de Zaragoza y la tienda que Gardeniers tienen el Espacio Biosfera de Gran Casa.

Cielos de Ascara

Cielos de Ascara, ubicado en las Comarcas de La Jacetania y del Alto Gállego, es un proyecto de alto impacto social que pretende favorecer la vertebración del territorio a través de la mejora de la vida de las personas, especialmente con diversidad funcional, favoreciendo su inserción sociolaboral a través de la mejora de la formación y del acceso al empleo. Paralelamente, se trata de un proyecto de recuperación de cultivos tradicionales y de agricultura y ganadería ecológica y sostenible. En agricultura ecológica trabaja con la trufa, boliche, lenteja, garbanzo, patatas, espárrago, centeno y piparras, producto que acaba de salir al mercado. En el área de ganadería ecológica, su miel ecológica de trashumancia.