Los amigos de Ambar nos han enviado una muestra de lo que denominan «la cerveza de la alegría». Esta nueva incorporación a la gama «Ambiciosas» de Ambar recibe el nombre de «Azahar de la Aljafería». Además de estar deliciosa es una inteligente apuesta que gira en torno a las naranjas del bellísimo y evocador patio de la Aljafería.

Antonio Fumanal, maestro cervecero de la firma, ha querido transmitir una sensación de paz, tranquilidad y alegría, cualidades que buena falta nos hacen, inspirado en un jardín de naranjos. Para ello, no solamente ha utilizado el zumo como ingrediente, con su aporte de acidez, sino también cada una de sus partes: desde la corteza, rallándola para obtener los aromas más finos y volátiles, hasta la parte blanca, donde residen las notas más profundas de la naranja, que se muele junto al lúpulo durante la ebullición de la cerveza. Un largo camino para el que se han empleado técnicas manuales, capaces de controlar muy de cerca todo el proceso y poder mantener aromas y estructuras correctamente.

Esta Ambiciosa ha sido elaborada con naranjas recolectadas, una a una, en el jardín del palacio de la Aljafería, conocido en el siglo XI como el palacio de la Alegría.

El resultado es una cerveza con notas rojizas distinta desde el comienzo. La parte más dulce de esta Ambiciosa se deja notar por la nariz, con el aroma, las notas frescas extraídas de la corteza de las naranjas. Sorprende en paladar por sus tonos amargos fruto de la combinación de la naranja con el lúpulo.

«Se trata de un homenaje al pasado, un ejercicio para entender de dónde venimos y mirar hacia dónde vamos», según Fumanal. Todo ello representado en los naranjos que crecen en el jardín del palacio del siglo XI, situado en Zaragoza, cuyos restos mudéjares fueron declarados Patrimonio de la Humanidad en 1986. Un ejemplo de arquitectura hispanomusulmana a la altura de la Alhambra de Granada y de la mezquita de Córdoba.

Elaborada con agua, malta de cebada, naranjas, miel y lúpulo, Azahar de la Aljafería permite maridajes muy divertidos como los sushis japoneses, guacamole, y postres de chocolate.